Warren Buffett quiere
revolucionar la industria
El inversor más exitoso del mundo impulsa a una empresa que investiga y
construye todo tipo de edificaciones con módulos, de forma rápida, simple y
barata
25 de junio de 2021 16:56
LA NACION
Danny Forster & Architecture
La construcción es
una industria gigantesca plagada de ineficiencias y costos en aumento. El que logre automatizarla, de la manera que lo hizo Henry
Ford con la industria automotriz, va a hacer una fortuna. Así sentenciaba el
Wall Street Journal, en mayo, al analizar uno de los fenómenos incipientes en
el mercado constructor e inmobiliario: las construcciones modulares y
prefabricadas.
La idea de fondo es la de automatizar procesos y producir a
escala. La fabricación en línea da resultados más eficientes, produciendo
mayores cantidades a menores precios. Es una premisa que aplica a todo tipo de
manufacturas, desde paquetes de fideos a zapatillas y llegando a automóviles.
Pero, ¿casas? ¿Restaurantes? ¿Hoteles? Así parece. Lo que empezó como un furor
millenial y minimalista por hogares prefabricados y sustentables hoy es una
cruzada de inversores de alto perfil que buscan innovar con tecnología, nuevos
métodos y materiales para revolucionar una industria que ha visto pocos cambios
desde fines del siglo pasado. El último en lanzarse a la carrera de encontrar
maneras más económicas, sustentables y eficientes para construir fue el
inversor Warren Buffett.
El caballito de batalla del exitosísimo Buffett es una de sus
empresas, MiTek, que el magnate compró a través de su conglomerado Berkshire
Hathaway en 2001 y hoy tiene casi 6000 empleados. MiTek es un proveedor global
de software, servicios y soluciones de ingeniería para la industria de la
construcción. La empresa unió fuerzas con un reconocido estudio de arquitectura
de Nueva York, Danny Forster & Architecture (DF&A) para lanzar lo que
bautizaron como Iniciativa Modular, con la intención de responder al gran
desafío que tiene la industria: satisfacer la demanda de construcciones (y
comunidades) más inteligentes, económicas y sustentables. Básicamente, DF&A
estará a cargo del diseño y colaborará con la investigación, que encabezará
MiTek, con sus considerables recursos económicos y de capital humano.
Cómo es el plan
¿Qué es lo que harán? La iniciativa gira alrededor de fabricar
módulos para ensamblar, desde casas hasta restaurantes, simplificando la vida a
arquitectos, desarrolladores y consumidores en general. Proveerán software de
diseño especializado, manuales de instrucción y atención personalizada en todo
momento, logrando así “democratizar la construcción modular y revolucionando la
industria”, según las palabras del arquitecto Danny Forster. La idea es hacerlo
accesible para cualquiera: “El diseño por módulos tiene ventajas clarísimas,
pero para el constructor comercial promedio los riesgos son demasiado altos y
la curva de aprendizaje demasiado empinada. Nuestra plataforma va a cambiar
eso”, se entusiasma. Los componentes se construyen en una fábrica y luego son
enviados al lugar de destino para ser ensamblados de forma extremadamente
simple, con instrucciones precisas.
A medida que la construcción modular se convierta en una opción
real y factible, el método se podrá aplicar a una gran variedad de sectores:
hotelería, salud, educación, residencial y familiar. Todo podrá construirse con
los eficientes diseños modulares. Incluso son atractivos para las viviendas
sociales, una necesidad insatisfecha en muchas ciudades del mundo.
El enfoque de MiTek, dicen en la empresa, no se trata únicamente
de la fabricación y el ensamblaje, sino también de la innovación a lo largo de
todo el proceso. ¿Cómo lograr diseños de calidad y muy fáciles de construir?
¿Cómo encontrar maneras de que el sistema de cañerías se instale de forma
inmediata? ¿Cómo transportar los módulos de forma rápida y barata?
Para responder a estas preguntas, la empresa también estableció
el Laboratorio Modular para experimentar y mejorar los sistemas de fábrica con
los que se elaboran los componentes. Lo que buscan es reinventar el proceso,
asegurando al cliente que no haya posibilidad de errores en el ensamblaje, y
hasta un monitoreo digital a través de un software que hace un seguimiento en
tiempo real de la instalación. En un comunicado, hablaron de hasta 400
ingenieros en sistemas trabajando en el research & development para los
procesos de automatización.
Como toda innovación tecnológica, la construcción modular al
principio genera cautela y desconfianza. ¿Por qué andar experimentando si algo
“funciona bastante bien”? La respuesta de empresas como MiTek seguramente sea
“porque se puede hacer mejor”. Aparentemente, mucho mejor. Y personas como
Buffett, con un ojo en el presente y otro en el futuro, ya lo tienen muy en
claro.
Tomás Gonzalez Casartelli